Un día todos los dioses de la India se reunieron en el monte Meru, el ombligo del mundo, para discutir cómo harían para obtener el amritaelixir de la inmortalidad, que se hallaba escondido en las profundidades del océano.
Ante la sugerencia de Visnú, deciden agitarlo y utilizan a Vasuki, la serpiente, como cuerda, y al monte Mnandara, situado sobre una tortuga, como paleta.
Los Deva, los dioses amables con la humanidad, tomaron a Vasuki por un extremo, y los Asura (o anti dioses) lo hicieron por el otro. Según tiraban, la paleta daba vueltas para uno u otro lado, agitando el océano que de pronto, se hizo lechoso y se convirtió en manteca.
Los dioses continuaron batiendo esta peculiar mezcla y lentamente surgieron catroce cosas preciosas: entre ellas, el sol, la luna, Lakshmi (esposa de Visnú) y finalmente, Dhanvantari, el médico del fios, llevando el amrita.
Los Deva y los Asura querían probarlo a toda costa, pero Visnú engañó a los Asura para que no lo hicieran. Tan solo Rahu ("el que agarra") una suerte de demonio, bebió un sorbo. Pero para impedir que alcanzara la inmortalidad, Visnú le cortó la cabeza. Sin embargo, siguió siendo inmortal y le declaró la guerra a Soma, el dios de la Luna, al cual se tragó y regurgitó varias veces, en un intento por hallar más elixir de la inmortalidad.